Nos referimos al Range Rover Sport, que estrena ahora su tercera generación, basada una vez más en el Range Rover normal -que lleva en el mercado unos pocos meses-, que hace especial hincapié en aspectos como la electrificación o la conectividad.
Este modelo es un enorme 4×4 -mide 4,94 m de largo, 2,04 m de ancho y 1,8 m de alto- que consigue un excelente CX de 0,29, que es un valor muy ajustado para sus dimensiones.
Pero uno de los aspectos más interesantes del coche es toda su tecnología mecánica, donde no faltan motores turbodiésel, un potente V8 de gasolina e, incluso, dos híbridos enchufables con una autonomía eléctrica de récord, que puede superar los 100 km.