Los avances en materia de movilidad siguen cosechando hitos que pasan desapercibidos -salvo para ti que nos lees, claro-, pero que son de gran importancia. Dentro del sector, uno de los negocios con más futuro es, sin duda, la llamada «entrega del último kilómetro».
Ya te hemos hablado de algunas ‘startups’ prometedoras como, por ejemplo, Boxbot. Pero, continuamente, surgen nuevas compañías con muy interesantes propuestas. Éste es el caso de Postmates, una empresa especializada en pequeños repartos urbanos que ha conseguido la autorización del ayuntamiento de San Francisco para ensayar con Serve, su robot autónomo.
El nombre de este simpático prototipo se debe, precisamente, a su especialidad: está diseñado para llevar comida preparada hasta tu puerta. Y, a pesar de su pequeño tamaño, posee una tecnología muy avanzada.
Te lo trae ‘calentito’
Incorpora varios sensores entre los cuales se encuentra un Lidar firmado por Velodyne. La información que recogen se traslada a un procesador Nvidia Xavier, una IA que la convierte para generar una imagen de su entorno en tiempo real. Básicamente, lo mismo que haría un cerebro humano con los datos proporcionados por sus cinco sentidos.
Otro aspecto destacable es el sistema de iluminación dinámica que posee en la parte frontal. Representa un par de ojos humanos y, con ellos, es capaz de ‘guiñar’ o ‘parpadear’ para advertir de sus intenciones a los peatones. Cuando llegue a tu casa con el pedido -puede recorrer hasta casi 50 km-, tendrás una pantalla táctil en su parte superior para confirmar la entrega.
Los creadores de Serve destacan, por encima de todo, su capacidad para desenvolverse por las aceras, respetando a los transeúntes y esquivando obstáculos como farolas o bocas de riego. Desde luego, esta cualidad ha debido ser su mejor argumento para obtener el permiso de la conocida ciudad californiana. Y es que San Francisco, en el pasado, ha retirado su beneplácito a numerosos robots autónomos de este tipo.