No es algo extraño escuchar que determinado modelo ya incluye elementos fabricados con impresoras 3D; es cierto que suele ser en vehículos que no tienen grandes tiradas de producción y en piezas de tamaño pequeño -el mejor ejemplo es el Mini GP-, pero parece que eso ya está cambiando, o al menos Porsche ya lo está intentando con algo más voluminoso.
De hecho, a partir de ahora, el catálogo Performance Parts de Porsche Tequipment -compuesto por todo tipo de exclusivos accesorios deportivos y kits para los modelos de la marca; por ejemplo, hay uno para el GT2 por… ¡¡100.713 euros!!-, ya incluye el denominado ‘asiento envolvente bodyform impreso en 3D’, a razón de 2.299 euros la unidad.
Disponible para los Boxster, Cayman y 911, desde febrero del año que viene también aparecerá en el configurador de la marca como opción de fábrica; en torno a un 8% más ligero que un bacquet similar, aparte de su diseño único este asiento destaca sobre todo por la parte central, que es la que incluye elementos fabricados con la técnica 3D, como son algunas superficies del cojín y del respaldo -que se puede elegir en tres niveles de dureza-.
Para que el asiento fuese del agrado de los usuarios, en Porsche han estado haciendo pruebas con clientes en diversos tipos de eventos que han tenido lugar en circuito, como los trackdays que Manthey-Racing suele organizar en el trazado de Nürburgring Nordschleife. Quienes los probaron destacaron la posición ligeramente más baja que permiten estos asientos, un buen soporte para las piernas y que no provocan mucha transpiración.
Este asiento, que una vez adquirido se monta en pocos minutos en cualquier Centro Porsche, emplea una construcción que denominan ‘de sandwich’: en este caso hay un soporte base hecho de un material llamado polipropileno expandido que está unido a una capa transpirable, hecha a su vez de una mezcla de materiales a base de poliuretano fabricados mediante un sistema aditivo con una impresora 3D. Los componentes se unen entre sí mecánicamente, “lo que significa que el asiento no genera emisiones asociadas a adhesivos de ningún tipo”, destacan desde la marca.
Por otro lado, la capa exterior está hecha en Race-Tex, un material antideslizante que siempre viene bien para sujetar el cuerpo en las curvas durante la conducción deportiva. Aparte, hay unas secciones expuestas de la estructura con una celosía impresa en 3D y que se pueden elegir en colores negro, rojo y amarillo -eso sí, con un sobrecoste de 423 euros-, aunque desde febrero se sumarán otros tres nuevos colores -dos azules y un gris-.
Y este ha sido el primer paso, porque la idea a medio plazo es que Porsche pueda ofrecer asientos de este tipo utilzando la tecnología 3D y con una forma adpatada a la fisonomía de cada cliente. Es otra tecnología con la que la marca lleva trabajando desde hace ya un par de años, y que ya es bastante habitual en el mundo de la competición, para que los pilotos oficiales de una marca puedan conducir de la manera más cómoda y segura posible.