El concepto de la realidad aumentada no es algo nuevo a estas alturas. Es una tecnología que, actualmente, encuentra cada vez más aplicaciones entre los sectores profesionales -como la educación o la sanidad- y también en el ámbito doméstico como, por ejemplo, los videojuegos.
Ahora, Volvo quiere utilizarla también para sus investigaciones en seguridad. Junto a Varjo -un especialista finlandés en sistemas VR-, ha desarrollado un nuevo método de trabajo que mezcla la realidad con la simulación.
Hacia la ‘realidad mixta’
Antes de comenzar una prueba en la carretera real, el técnico se equipa con unas gafas especiales. Éstas poseen dos cámaras de alta definición, que proporcionan una visión con calidad 4K y velocidad superior a los 60 cuadros por segundo. Y, al mismo tiempo, permiten superponer gráficos a la imagen.

De este modo, el probador puede revisar datos en tiempo real o simular situciones de circulación, con la sensación de que todo lo que está viendo… es real. Mientras tanto, otro técnico supervisa las operaciones desde el asiento trasero y analiza la información recogida.
Volvo asegura que, con este método, han acelerado sus procesos de investigación y desarrollo. O al menos ésa es la opinión de su director tecnológico, Henrik Green: «Con la ‘realidad mixta’, podemos empezar a evaluar nuestros diseños y tecnologías mientras todavía están en la pizarra […] En lugar de la tradicional evaluación estática de proyectos e ideas, podemos ensayar estos conceptos inmediatamente en la carretera. Esta perspectiva nos ofrece un potencial ahorro de costes, identificando con mucha antelación las prioridades de diseño y solucionando los ‘cuellos de botella'».