No deja de ser sorprendente, en el mundo de la automoción, cómo un concepto tan sencillo puede cambiar tanto. Y es que, a lo largo de los años, incluso una convención tal como la idea del ‘lujo automovilístico’ ha evolucionado notablemente.
Un buen ejemplo es la visión norteamericana de dicha idea. Lo que en los ‘felices veinte’ era vanguardia -con marcas como Duesenberg, Cord o Stutz- llegó a consolidarse como un estilo de vida en los sesenta -con Cadillac o Imperial como protagonistas-, para después… convertirse en una ‘caricatura’ a partir de los setenta. Y, en esto último, Lincoln jugó el poco confortable papel de núcleo de las críticas.
Por fortuna, la filial de lujo de Ford guarda aquella época en su memoria como un simple mal recuerdo. La Lincoln de hoy en día no puede alejarse más de aquella ‘ostentosidad’ con olor a naftalina. Sus actuales modelos encarnan, por encima de todo, un gran gusto -y pasión- por la tecnología.

Y el Lincoln Zephyr Reflection -su última novedad, presentada en el Salón de Shangái– parte con fuerza para embelesar al público centroasiático, entre el cual esta marca posee una notable presencia.
El maestro de ceremonias
Este prototipo sirve como anticipo de lo que será el sustituto del actual MKZ. Un modelo con el cual ni siquiera los consumidores americanos podrán soñar, pues ya está confirmado que se comercializará exclusivamente en China. En materia estética, se presenta continuista con lo ya conocido en Lincoln, destacando su limpieza general de líneas, una silueta lateral muy ‘a la europea’… y, eso sí, la predominancia de la parrilla frontal, detalle -este sí- muy americano.

El interior del Lincoln Zephyr Reflection sí es, por comparación, revolucionario. Una gigantesca pantalla aprovecha toda la longitud del salpicadero -muy al estilo del Ford Evos-, dejando una parte como ‘Virtual Cockpit’ para el conductor, y otorgando el mayoritario resto a los pasajeros en un enorme ‘escritorio’ que permite mostrar y utilizar varias funciones de conectividad y entretenimiento de forma simultánea.