Hoy he visto en el telediario como un paisano de Pontevedra plantaba flores en los baches de la carretera, para llamar la atención sobre los enormes socavones que hay en su pueblo sin arreglar y que ya le han costado unos neumáticos y un palier. Desde luego que el firme de muchas carreteras de este país está hecho un asco y resulta peligroso circular por muchas de ellas. La falta de mantenimiento y dejadez puede provocar un accidente y poner en riesgo la vida de los ocupantes de los vehículos y también la ‘integridad del propio coche’…
Pero a mi me pasa algo parecido o ‘contrario’ donde vivo, en la localidad madrileña de Las Rozas -Madrid-, donde en vez de baches hay unos badenes enormes en los pasos peatonales, que estoy seguro que no cumplen la normativa. Cada vez que paso por ellos la suspensión del coche sufre muchísimo, por lo que tendré que cambiar los amortiguadores pronto… Y, si te despistas y vas deprisa puedes ‘estrellarte’.
¿Tendré que hacer lo mismo en mi localidad y ‘plantar’ flores en los badenes para presionar al alcalde que cumpla la ley y reduzca los badenes? ¿Qué dice la normativa al respecto?
Chema T., Madrid
RESPUESTA: Algunos ayuntamientos no han terminado de adaptar los badenes de las carreteras de su circunscripción a la actual normativa, que establece que el paso peatonal sobre-elevado puede tener una zona elevada central de 10 centímetros de altura y cuatro metros de longitud con dos rampas.

Las mencionadas rampas no deben superar el metro de longitud si el badén está situado en una zona con la velocidad máxima limitada a 30 km/h, 1,5 m para una limitación de 40 km/h y 2,5 m para las calles donde se puede circular hasta 50 km/h. Además, el borde la rampa -distancia entre el asfalto y el principio de la elevación-, no tiene que llegar a los 5 mm de altura.