Cuando decimos de un coche que puede proteger tu vida, lo solemos aplicar a modelos que gracias a sus numerosas medidas de seguridad activa y pasiva es capaz de evitar los accidentes y en caso de que estos lleguen a producirse, supongan el menor grado de lesiones y daños para los ocupantes que viajan a bordo e, incluso, para otros usuarios.
Sin embargo, dentro de marcas como BMW existen departamentos destinados a preparar coches como el X5 Protection VR6, que no sólo lo hagan bien frente a, supongamos, choques contra otros vehículos, árboles, guardarraíles… sino también frente a «ataques violentos, secuestros y delincuencia organizada». Y aunque suene exagerado, estos criterios son vitales para muchos clientes de la marca alemana en regiones como África, América del Sur o Rusia.
Aunque el coche, a primera vista, parece un X5 más -una discrección que, según los responsables de la marca, supone un valor añadido de cara a la seguridad-, en realidad hablamos de un coche que ha obtenido una certificación oficial llevada a cabo de acuerdo con las Directrices para vehículos resistentes a balas -BRV 2009-, vehículos resistentes a explosivos -ERV 2010- y PAS 300, que definen la resistencia a las balas y la fuerza explosiva de los vehículos de seguridad.
Lograr dicha certificación no consiste tan sólo en reforzar ciertas partes del vehículo, sino sobre todo en eliminar posibles puntos débiles, que en este tipo de coches, por ejemplo, se encuentran en las transiciones entre chapa y cristal. Por otra parte, este X5 Protection VR6 ha recibido importantes refuerzos en dos de los elementos que más van a notar el incremento de peso que supone el blindaje: frenos, neumáticos y suspensión.
Entre el equipamiento tecnológico, este X5 viene de serie con la dirección ‘activa integral’, que permite que las ruedas delanteras giren en direcciones o puestas o en la misma dirección para incrementar la maniobrabilidad.
Como curiosidad, se puede limitar la apertura de las ventanillas hasta un máximo de sólo 10 cm; una estrecha abertura que permita al conductor comunicarse con el exterior -aunque tampoco es necesario bajarla, porque el coche viene con un intercomunicador a base de micrófonos y altavoces- o entregar documentos… pero que también impide que algún atacante introduzca algo por la abertura.
También cuenta con un ‘sistema de alarma de ataque’ o botón del pánico mediante el cual basta presionarlo para que rápidamente se bloqueen las puertas y las ventanas del conductor y el pasajero se cierren -si es que estaban abiertas- al tiempo que comienza a activarse alarmas visuales y sonoras.

En opción hay elementos muy ‘de película‘, como las luces intermitentes delanteras en la parrilla frontal, las luces intermientes traseras, luces en la parte superior, sirena, una antena adicional para radio digital y hasta blindaje para la batería del vehículo.
El corazón del coche
Todos elementos son muy interesantes, pero lo que de verdad te puede salvar la vida en un momento dato es lo que se conoce como ‘compartimento blindado de pasajeros’, que sería el equivalente a introducirse en la cámara acorazada de un banco. Por una parte, están los elementos moldeados en acero de alta resistencia que se adaptan al contorno de la carrocería. Tampoco falta un protector de aluminio en los bajos del coche cuyo fin es evitar que puedan entrar esquirlas procedentes de alguna explosión.
También son fundamentales los cristales; en este X5 se emplean vidrios de nada menos que 33 mm de grosor en parabrisas o lunas de las puertas. Por lo demás, cualquier hueco o recoveco de la carrocería queda ‘sellado’ con protecciones diversas, placas de blindaje… etc.
¿Qué se consigue con todo esto? Por ejemplo, que el coche soporte sin despeinarse un ataque con armas de tipo AK-47. Además, el habitáculo también permanece indemne ante explosiones de 15 kilos de TNT que se detonen a tan sólo cuatro metros. Ni siquiera las ventanas en este caso se ven afectadas.

En cuanto a los bajos son capaces de aguantar el ataque con granadas del tipo DM51, pero se puede solicitar en opción un blindaje aún más resistente, a base de un refuerzo interior en compuestos de fibra para aguantar granadas de tipo HG85. Y como en estos momentos los ataques también pueden venir por el aire en forma de drones con cargas explosivas, el techo también se puede pedir en opción con una protección adicionla en materiales compuestos de fibra y acero.
Finalmente, una de las partes más sensibles de cualquier vehículo, su depósito de combustible, es autosellable. Eso significa que, si debido a algún ataque se perfora, cuenta con un revestimiento especial que hace que se produzca cualquier derrame de combustible -que podría ser la causa de algún incendio-.
Para que, además de repeler los ataques, el coche también esté listo para salir huyendo, nada mejor que recurrir al potente bloque V8 biturbo de gasolina, que en este modelo desarrolla nada menos que 530 CV para conseguir una velocidad máxima de 210 km/h -se ha limitado electrónicamente- y una aceleración de 0 a 100 km/h en tan sólo 5,9 segundos.