Primero, empezaron con un botón. Un pequeño punto de partida para Jong-Hoon y Pape, ingenieros especializados en asistentes a la conducción que viven y trabajan en la ‘ciudadela’ que Renault mantiene, como centro técnico, a las afueras de París. Pero que, sin duda, les ha llevado a un gran presente: ser los responsables del buen funcionamiento del ‘Advanced Park Assist’ que la marca francesa ofrece en sus modelos.
Aun con la meta de lograr que un coche pueda -en la práctica- aparcar por sí mismo, vieron necesaria la existencia de un método que permitiera al conductor consentir el movimiento automatizado del vehículo. Como buenos ingenieros, optaron por la solución más sencilla: añadir un pulsador más en el habitáculo.

Su funcionamiento sería fácilmente comprensible para cualquiera: había que mantenerlo apretado durante toda la maniobra. De esta manera, se conseguía que el conductor no se despreocupara más de lo admisible. Pero, entre el escritorio y la línea de producción, existen muchos ‘pasos intermedios‘. Y, en uno de ellos, tuvieron que desandar el camino. Otro equipo emplearía, finalmente, ese botón… para otra funcionalidad completamente distinta.
El otro ‘One-Pedal’
Regresar sin éxito a la mesa de trabajo no es ‘plato de gusto’. Mas, pasado el quebranto, llega la hora de volver a empezar. Nuevas ideas dejan paso a bocetos que se agolpan, así como se acumulan -inevitablemente- las horas de codificación de software, los cálculos en el ordenador… y los envases de comida rápida.
Y, finalmente, una nueva idea está lista. Tras sus cavilaciones, Jong-Hoon y Pape concluyen que la mejor manera de otorgar el control al conductor mientras su coche aparca por sí mismo, es a través de su pie derecho. O, mejor dicho, el pedal del acelerador. Al igual que ocurría con su ‘botón’, mantenerlo levemente pisado durante la maniobra es todo lo que hace falta para ‘permitirla’. Si, por cualquier circunstancia, es preciso interrumpirla, levantar la presión detiene el vehículo.
Y, en esta ocasión, sus esfuerzos obtienen la ansiada ‘luz verde’. Sobre un Espace de reciente fabricación, muestran orgullosos cómo este singular ‘one-pedal’ ha llegado a los Renault de producción. El día de contar su historia termina, y tanto Jong-Hoon como Pape regresan sonrientes a casa. Pero no ha sido una jornada más en la oficina. Hoy, ambos han demostrado que tenían razón.