Los conductores españoles confían en el coche autónomo. Es la conclusión principal que se extrae de un estudio realizado por Bosch sobre la percepción de la conducción automatizada.
Las respuestas recogidas muestran una clara tendencia a favor de ceder el manejo al propio vehículo. Sobre todo, si hablamos de viajes largos. Y es que más de dos tercios de los españoles -69% de los encuestados- consideran al coche autónomo como una herramienta especialmente útil para largos desplazamientos. Principalmente, si dichos viajes son por autopistas y autovías -64 por ciento-, y al ir de vacaciones -60 por ciento-.
¿Por qué precisamente en los viajes más duraderos? Porque tanto tiempo de conducción podría emplearse en otras labores más apetecibles. Así, dos tercios de los encuestados afirman que utilizarían el tiempo que se ahorran al conducir para disfrutar del paisaje y para hablar o interactuar con los pasajeros.
Pero no solo en los largos desplazamientos es cuando el coche autónomo se gana el favor de los españoles. También prefieren cederle el control en situaciones complejas para la conducción, como con mal tiempo -53% cedería el control a la tecnología en estas circunstancias- o por la noche -más de la mitad-.
Sin embargo, aún hay reticencia a confiar a un vehículo automatizado lo más valioso de cada familia: los hijos. Algo menos de la mitad -41%- de los españoles confiaría el trasporte de sus hijos a un coche autónomo. A pesar del dato, es el segundo porcentaje más alto entre los 13 diferentes países en los que se ha realizado el estudio.
¿Qué nos aportará un coche autónomo?
Parece claro que la valoración de los coches autónomos es positiva, pero ¿por qué? ¿Qué ventajas y posibilidades le ven los españoles a este tipo de movilidad? Pues confían en que la introducción de esta tecnología suponga un aumento significativo de la comodidad –más del 70% de los encuestados lo esperan- y de la seguridad -67% creen en ello-.
El informe también refleja cuáles son las funciones que los encuestados cederían a un vehículo automatizado. Las respuestas muestran que los españoles quieren librarse de algunas de las tareas más tediosas y desesperantes al conducir, como son el aparcamiento -71%- y la búsqueda automatizada de plazas de estacionamientos -78%-, así como la circulación sin estrés en atascos -60%-.
El interés por la conducción autónoma es tal que supone un importante argumento de ventas, que aumentaría el interés por comprar un vehículo nuevo. Esto se incrementa en el caso de los hombres y de los jóvenes. Y, como conclusión a este estudio que ha encuestado a 1.000 españoles mayores de 18 años, el 60% de ellos desea una introducción lo más rápida posible del coche automatizado. Sobre todo, los que viven en áreas urbanas.
