Un ciberataque ha interrumpido durante varios días la actividad de una empresa que fabrica grúas y trampillas para camiones. La compañía afectada por este caso ha sido el Grupo Palfinger, una multinacional austriaca que opera en más de una treintena de países, incluido España.
En un comunicado emitido el pasado 25 de enero, la empresa reconoció estar siendo objetivo de un ciberataque a nivel global. Esto crackeo afectó profundamente a la normalidad de la compañía, hasta el punto de verse obligada a detener toda su infraestructura informática. Y todo significa todo. No pudieron usar el correo electrónico ni recibir o procesar consultas, pedidos, envíos y facturas. La única forma que tuvieron los clientes y los empleados para comunicarse fue a través del móvil, mediante mensajes de WhatsApp o a través de llamadas telefónicas.
El problema afectó a toda la red informática, por lo que sufrieron sus consecuencias buena parte de las oficinas que Palfinger tiene repartidas por todo el mundo, haciendo difícil seguir con el ritmo de producción.
Pero parece que ya está todo solucionado. Hace apenas unos días, la empresa anunció que ya ha podido volver a su actividad normal.
En una nota colgada en su web, Palfinger anunció que «ha recuperado en gran medida el control de sus sistemas informáticos y actualmente está trabajando a toda velocidad para restaurar su plena capacidad operativa.» Si bien aún no ha alcanzado el ritmo normal de producción, confía en llegar a él de forma gradual.
¿Cómo afectó este ciberataque a la actividad de la empresa en España?
Esta empresa tiene presencia en España mediante algunos distribuidores del grupo. Preguntados por HackerCar sobre cómo se vieron afectados por este suceso, fuentes de la división española de Palfinger afirmaron que el ataque lo sufrió su casa matriz en Austria, de forma que no les afectó directamente, sin precisar más detalles. Sí que quisieron confirmar que el grupo ya ha restablecido algunos servicios que se vieron afectados.