La relación entre el automóvil y el cine ha sido siempre muy especial. No en vano -como la reciente ‘Le Mans ’66’ demostró-, el largo camino de la automoción está lleno de historias que, por sí solas, podrían llevarse un Oscar al mejor guión.
‘Encerrado’ en el marco de la pantalla, el poder icónico de esta máquina se ve reforzado por la magia del celuloide, mientras ayuda a su protagonista a llegar a su destino… o a escapar de él. Las marcas de coches lo saben, y no han sido pocas las que han registrado -a lo largo de la historia- un fuerte aumento de sus ventas gracias a colocar un modelo suyo en tal o cual película.
Pero mucho antes de que Powerpoint convirtiera el ‘emplazamiento de producto’ en un tema de dominio público, ya había alguien que lo ejercitaba con pasión. Desde el estreno de ‘Goldfinger’ en 1964, el espía británico James Bond pasó de ser otro personaje literario más a convertirse en un icono cultural. Y lo hizo a los mandos de un Aston Martin, su emblema de cabecera desde entonces. Bueno, salvo por ‘aquella etapa’ en los noventa. Pero es que todo el mundo buscaba nuevas sensaciones en los noventa…
La misión: disfrutar
Apenas quedan dos meses para el estreno de su próxima cinta, ‘No hay Tiempo para Morir’. Y, aunque -evidentemente- no conocemos demasiado la trama, ya sabemos que albergará un pequeño gran homenaje a los modelos que pasaron por las manos de 007.
En paralelo, mientras llega el estreno la rama Q de la marca ha accedido a compartir algo de este placer ‘top secret’ con sus clientes más selectos. Para ello, acaba de lanzar dos ediciones limitadas inspiradas en este universo de espionaje.
La primera toma la base del actual Vantage, y se inspira en el V8 Vantage manejado por Bond -interpretado por Timothy Dalton- en ‘Alta Tensión’. Este ‘homenaje’ viene completo, incluido el portaesquíes de la parte trasera.
Pero, si no tienes suficiente, lo más exclusivo de Aston Martin -el DBS Superleggera– tendrá también su propia ‘007 Edition’. La fuerza bruta de los 715 CV de su V12 se refina gracias a un manto de color Ceramic Grey, en combinación con diversos apliques en carbono brillante y unas exclusivas llantas de 21 pulgadas rematando el conjunto. Lamentablemente, los creadores de estas variantes ‘sólo para sus ojos’ -y sus carteras- no han querido desvelar las tecnologías que poseen para salvar el mundo… Es un asunto de alto secreto.
